Busca crecer bajo el concepto de "dark kitchen"

LA PANKA

Fecha Publicación: 10/06/2019 17:28:28 pm

Denisse Nossar es la dueña y fundadora de La Panka. Desde el 2014, el restaurante de brasas se expandió con velocidad al pasar de uno a 13 locales a través del modelo de franquicia.

 

La ejecutiva, señala que la expansión continuará este año con la apertura de un local en Trujillo en noviembre en un mall, así como su primera salida al extranjero con un restaurante en Chile.

“Este local podríamos abrirlo a inicios del 2020”, apunta, tras indicar que negocian con tres posibles socios chilenos. “El plan aquí es compartir el riesgo”.

 

Actualmente, el ticket promedio es de S/ 40. En los próximos tres años la marca espera superar los US$ 15 millones de facturación. “Este año esperamos cerrar con un crecimiento de 20% en ventas con nuestras aperturas”, dice.

 

Cuando Nossar decidió expandirse, a través de franquicias, no solo elaboró manuales, sino que creó un centro de producción, que es también el centro de reparto en Surquillo. Para ello, invirtió US$ 150,000.

Desde dicho espacio se distribuyen los principales insumos para toda la cadena: el pollo, los anticuchos y las salsas.

 

¿Cuánto cuesta la franquicia? Nossar señala que son US$ 250,000, que incluyen el pago de entrada y la adecuación del local, que debe tener un mínimo de 200 metros cuadrados. El retorno tarda dos años y medio.

El primer local se abrió en el 2010 en un garaje de la avenida Villarán, en Surquillo. Hoy ese local ya no existe, pero sí uno en la misma vía de 130 metros cuadrados y 24 mesas, en el que invirtió US$ 40,000.

Ese es el local emblemático, agrega Nossar. Ese es el único espacio que es de su entera propiedad, el resto son franquicias repartidas en ocho distritos de la capital.

 

Ahora, la tarea de crecer está vinculada a los nuevos modos de consumo de los peruanos, a través de aplicaciones de reparto.

La ejecutiva indica que el próximo paso es crecer a través del concepto del “dark kitchen”, lo cual significa abrir locales en espacios en los que no se atienda al público. “No hay mesas, meseros, solo la cocina y los cocineros”, detalla.

Y es que los locales –refiere- solo están hechos para preparar la comida para ser repartida a través de los diversos aplicativos que existen en el mercado.

Nossar sostiene que La Panka ya alista la apertura de dos locales de “dark kitchen”, siempre a través del modelo de franquicia. El primero se abrirá este mes en la zona de Santa Anita y el otro irá en Chorrillos para atender a nuevos públicos.

 “El costo es menor pues la inversión es de aproximadamente US$ 60,000”, señala. Esta fórmula también planea llevarla a provincia y al extranjero. Colombia está en la mira, apunta.

 

La empresaria agrega que, con el boom de las aplicaciones, La Panka debió armar una división de promociones específicas para domicilios.

Sostiene que hoy el 40% de las ventas de La Panka es a través de aplicativos. Incluso, refiere que la tendencia es de mayor crecimiento. “Es una guerra de precios básicamente. Hemos debido crear una carta para los restaurantes y otra para los aplicativos”, concluye.

 

En los próximos dos años, la marca frenaría su expansión en Lima para centrarse en provincias y en el extranjero.

 

En otros planes, la dueña y fundadora de La Panka, Denisse Nossar, revela que el año pasado abrió La Victoria, un restaurante de sopas y sánguches en la zona de Surco viejo. El plan es tener un segundo local en el que se promuevan ambas comidas. Incluso, señala que en el local de La Panka de Surquillo se iniciará un piloto de degustación de sopa.